CAROLINA ARREGUI A SU REGRESO DE PUERTO RICO

La protagonista de “Don Amor” habla luego del fin de las grabaciones
CAROLINA ARREGUI A SU REGRESO DE PUERTO RICO: “ESTA EXPERIENCIA ES PARA VIVIRLA SÓLO UNA VEZ”
La actriz llegó hace pocos días a Chile y lo único que quiere es descansar y desconectarse de todo. Eso sí, antes de eso, conversó con Terra.cl del repunte de la telenovela de Canal 13 y de lo que implicó estar casi un año viviendo en el país centroamericano.


Carolina Arregui está feliz. Volvió a su Chile y a reencontrarse con sus seres queridos luego de estar desde julio del año pasado grabando “Don Amor” en Puerto Rico. Y este retorno no sólo la tiene contenta por eso, sino que también porque se da en un momento en que la telenovela de UC-TV ha subido el rating que le fue esquivo en un comienzo.



Llegaste a Chile y me imagino que te diste cuenta que a “Don Amor” le está yendo bastante bien…
-Para sorpresa mía, sí, me di cuenta que las cosas parece que se fueron revirtiendo a nuestro favor, cosa que me tiene contenta porque allá nos dedicábamos solamente a trabajar, y la verdad es que fue una gran sorpresa y una tremenda alegría saber que lo que estaba pasando era súper bueno, así que estoy contentísima.



Ustedes partieron lento y se les criticó bastante en un comienzo, pero tomaron vuelo. ¿Qué crees que pasó que el público enganchó con la teleserie?
–Creo que esta teleserie, a diferencia de otras que empiezan a matacaballos, partió de menos a más, de a poco empieza agarrar vuelo la historia y yo creo que eso fue enganchando y también se dieron muchas cosas.



¿Cómo cuáles?
–Es primera vez que había una fuerte competencia de tres canales, produciendo tres teleseries nacionales. Lo otro es que el cambio de horario también afectó, porque el oscurecerse antes o después afecta que la gente consuma más o menos televisión, y también se está haciendo un poco más atractivo el tema de esta combinación de dos países en donde podemos apreciar cómo los puertorriqueños tienen su propia cultura, pero tenemos muchas cosas en común también, y eso es atractivo, el escenario, las playas, las palmeras. Pero básicamente es la historia la que se va desarrollando muy fuertemente a partir del capítulo veinticinco, de ahí en adelante no para, no para y no para hasta el final.



Es como una teleserie atípica…
–No es de esas teleseries que parte mostrando un cuento el descueve y luego se van desinflando y se quedan pegadas, esto es al revés, al principio tal vez la historia no decía mucho, pero poco a poco fue mostrando lo interesante que se va produciendo en esta cosa cuando se van relacionando los chilenos y los puertorriqueños, como el tema del suspenso… y es una teleserie que ya está hecha, o sea, no hay nada que hacer, no es una teleserie que vayas probando, testeando con el público que le gusta más, que le gusta menos, no, este es un producto que ya estaba cocinado y gracias a Dios está ocurriendo lo que está pasando, porque en el fondo ya no hay nada que hacer, la suerte ya está echada y afortunadamente está ocurriendo lo que todos creíamos que de alguna forma iba a pasar.



Al comienzo a la teleserie no le fue bien, ¿cómo fue para ustedes eso? ¿Cómo lo recibieron?
–Estábamos muy lejos.

Por suerte, ¿verdad?
-Claro, de alguna forma fue positivo en ese sentido, sobre todo para los chicos que estaban empezando, porque ellos, como personas jóvenes, estaban llenos de esperanzas, de expectativas… imagínate lo que hubiese sido estar bombardeado de una información negativa, eso los hubiera afectado evidentemente. Uno ya viene más curtido con el tema, entonces, ya está como más preparado, uno es más combatiente en ese aspecto. Y siempre estuvimos de pie, apostando y trabajando por algo independiente de lo que se dijera a distancia. Eso tiene que ser lo más importante, creer en el producto, saber que puedes hacer un buen trabajo, asumirlo con mucha responsabilidad y terminar con las botas puestas, así es como se debe trabajar, independientemente de que te aplaudan o no.

Y a ti te costó involucrarte en “Don Amor” por el hecho de irte a vivir a Puerto Rico. En ese sentido, este proyecto no fue fácil…
-Claro, claro que no fue nada de fácil.

¿Sufriste mucho estando lejos de Chile?
–Se siente la distancia de una forma feroz, sobre todo cuando no puedes agarrar un auto o un avioncito y estar en cuatro horas, entre todo son más de veinte horas para poder llegar de punto a punto, entonces, no es menor.

O sea, estando allá te deben haber dado ganas de escapar, de decir “necesito mi Chile”…
–O sea, a todos nos pasó, mi Chilito lindo, y uno aprende a valorar más las cosas cuando no las tiene al lado, esa es la pura y santa verdad.

¿Lloraste estando lejos de los tuyos?
-Dentro del personaje… y fuera del personaje, sí, un poco también.

Y si tuvieras que repetir la experiencia y Canal 13 te dijera que hay que ir a grabar una nueva teleserie en otro lugar del mundo, ¿qué dirías?
-No, yo no. Acepté hacer esta teleserie por muchas razones, me costó, pero tenía poderosas razones para haberlo hecho, sin embargo, era esta teleserie básicamente.

¿No volverías a repetir la experiencia de grabar en el extranjero?
–No, yo quiero seguir trabajando en el lugar que tengo que estar, que es mi país, así que sólo por una vez… esta experiencia es para vivirla sólo una vez, casi como el matrimonio (ríe), pero me traigo un montón de cosas positivas y el resto me cobran sobrepeso en el aeropuerto, así que las dejo allá (vuelve a reír).

En el verano se habló mucho de que te casabas, ¿en qué está eso?
–Les dio con que me voy a casar, hay un compromiso simbólico. Esta distancia de casi un año te puede fortalecer una relación o te la puede definitivamente quebrar. Lo que ocurrió, y lo que se manifestó en el verano, que fue cuando estuvimos de vuelta promoviendo la teleserie en el Festival de Viña, fue lo que hizo Roy y yo lo confirmé, que fue decir “realmente hoy podemos decir que esta distancia no quebró nuestra relación y nuestro amor, sino que, por el contrario, lo fortaleció y nos está proyectando a continuar una vida juntos, que es lo queremos hacer”. La prueba mayor ya fue superada.

¿Y la Carolina que llegó de Puerto Rico es muy distinta a la que se fue?
-No, en esencia siempre somos los mismos, con un poco más de canas y arrugas, pero esas ligerito se sacan (ríe)… la risa es la mejor terapia, así que a reírse.

Por último, ¿qué viene para ti en Canal 13?
-Por lo pronto, nada, yo no he conversado, estoy súper en el aire, no tengo idea, yo creo que de aquí a un par de semanas a lo mejor me voy a dar una vueltecita, pero ahora nos estamos dando un tiempo de vacaciones para que nos repongamos de esta distancia que duró tanto tiempo y que fue tan feroz.










Terra.cl